La villa encartada avanza en la puesta en valor de los restos arqueológicos con la recuperación de un sendero y la elaboración de un plan paisajístico

Fuente: elcorreo.com.  SERGIO LLAMAS | BALMASEDA. Foto: P.U.

Balmaseda está decidida a no seguir dándole la espalda a su historia. Por eso, la villa más antigua de Bizkaia tiene en marcha varias acciones para poner en valor el cerro del castillo, una colina que se alza sobre la localidad encartada y que atesora los restos de una antigua fortaleza medieval y de la muralla que protegía la zona. El año pasado se realizaron visitas guiadas a este entorno y se recuperó parte de un sendero que permite conocer el yacimiento. Este año se completará el acondicionamiento del camino y se colocarán paneles que permitan interpretar las ruinas. También se está desarrollando un plan de acción del paisaje, subvencionado por el Departamento de Medio Ambiente, Planificación Territorial y Vivienda del Gobierno vasco, que defina las actuaciones concretas con las que revitalizar el espacio. En la tarde de ayer, una sesión de participación ciudadana recogió la opinión de los vecinos a este respecto.

En 2009 se aprobó un ambicioso plan para convertir toda la zona en un parque urbano

El Ayuntamiento de Balmaseda aprobó en 2009 un plan especial de urbanización para convertir el cerro del castillo en un parque urbano que sacara todo el potencial a este tesoro arqueológico. Sin embargo, la falta de presupuesto del ambicioso proyecto –entonces se estimó la inversión necesaria en unos 12 millones de euros– ha obligado a poner en marcha pequeñas acciones que vayan avanzando su revalorización. «Son actuaciones que nos permiten dar pequeños pasos sin perder de vista el proyecto final», señaló el alcalde, Álvaro Parro, quien recordó que la de ayer fue la segunda sesión participativa en esta fase del proyecto. El año pasado hubo otras dos antes de abordar el estudio.

Los responsables de la empresa a cargo de estas acciones, Ikusmira Ondarea, destacaron que el camino ha sido prácticamente rehabilitado a falta de que se acondicionen el punto de salida y la zona más próxima a los restos arqueológicos. «Ahora estamos en la fase de diseño de los paneles», advirtieron. Tanto estos como el paseo, cuyo origen está en la misma ruta de Pandozales que conduce al Kolitza, estarán finalizados este año, previsiblemente después del verano.

Escaleras medievales

El sendero aprovecha una antigua servidumbre circular que permitía regresar al centro de la villa a la altura de la calle El Castillo. Lo hace aprovechando unas escaleras de época medieval que todavía se conservan y cuya recuperación se baraja para más adelante. «El objetivo es regenerar toda la zona tanto medioambiental como culturalmente, y hacer que Balmaseda vuelva a mirar hacia su castillo», explicaron en Ikusmira Ondarea.