Capilla y Palacio de la Familia Urrutia. Zalla

Proyecto de puesta en valor y difusión del Conjunto de La Mella.

Año: desde 2016

Ayuntamiento de Zalla / Gobierno Vasco. Departamento de Cultura.

Dentro de las subvenciones para la defensa y protección del patrimonio cultural, el equipo de Ikusmira Ondarea junto con el grupo de arqueología Ondare Babesa, el ingeniero José Luis Ruiz Diego y arquitecto Annibal González de Riancho, ha llevado a cabo las obras de consolidación de la cúpula de la capilla privada de la familia Urrutia y de los muros del palacio de la familia. Este conjunto residencial-religioso-productivo es uno de los más importantes de Bizkaia y ejemplifica el modelo de representatividad y de asentamiento de la Edad Moderna. El conjunto de capilla y palacio se complementan con un entorno paisajístico de altísimo valor ambiental junto al río Cadagua.

El objetivo de estas actuaciones es revertir los procesos de deterioro de los inmuebles y poder mostrar a la ciudadanía este importante patrimonio del municipio.

La solución técnica que el equipo dio a la cúpula de la capilla surgió tras el análisis pormenorizado de la techumbre y de los elementos sustentantes. El proceso de consolidación se puede observar en la siguiente presentación:

 

Cúpula Zalla

 

Por su parte, el palacio de la familia Urrutia requirió de otro tipo de actuaciones no menos complicadas. Tras determinar el estado real de la estructura del palacio, se procedió al desbroce y limpieza de muros. Se comenzó por la eliminación de vegetación interior, en la zona que circunscribe la fachada principal, la fachada oeste y los escasos restos de las fachadas norte y este. Posteriormente se eliminó la vegetación en la zona del cierre de fincas.

A continuación se consolidaron los restos de las fachadas norte y este para evitar la pérdida de la masa arquitectónica en el coronamiento de los muros y garantizar la seguridad de las personas usuarias.

Muy importante fue el desescombro del interior del palacio mediante pala excavadora y siempre bajo la supervisión del equipo de arqueología del proyecto.

Los huecos del palacio fueron consolidados para evitar un mayor deterioro y se confeccionaron marcos de madera.

El equipo de arqueología llevó a cabo la lectura de paramentos con el fin de determinar la evolución histórico-patrimonial del edificio.

Con los datos extraídos del trabajo de campo y con la documentación consultada en los archivos se realizó un estudio histórico-arqueológico que arrojó luz sobre el devenir histórico-arquitectónico del palacio de la familia Urrutia. Este estudio es clave para las intervenciones futuras en el inmueble.